La sobrina de la señora Vilma Agurto era la misma mujer de la que me había hablado mi hermano Rubén.
Tess Pedrociteerde uit2 jaar geleden
Sabía que estaba escalando aún la pendiente del dolor. Bordear una serie de acantilados, esperar llegar a la cima y sólo entonces iniciar el alivio de la bajada, recuperar la tranquilidad del llano, yo lo veía así
Tess Pedrociteerde uit2 jaar geleden
El color que toman los ojos de una persona que está agonizando es el único que no tiene nombre
Impressies
Henri López Pinedadeelde een impressievorige maand