«Ojos abiertos, oídos atentos y no olvides nada», se dijo, recordando el consejo que siempre le repetía la abuela Rin, «que la visión te lleve donde debes llegar y te enseñe lo que debes ver».
b1251297838citeerde uit2 jaar geleden
—Respetar el mar y la tierra, y las criaturas que vivan encima y debajo —recitó Monozuki, procurando adoptar un tono solemne—. Tomar solo lo necesario y no dañar a los espíritus.
b1251297838citeerde uit2 jaar geleden
filigrana de color ámbar oscuro,
Impressies
Virgydeelde een impressie2 jaar geleden
👍De moeite van het lezen waard
Me gusta como en esta pequeña historia nos hacen reflexionar sobre la convivencia y respeto por la naturaleza
Mágico, cautivador y sin pretenciones. El equilibrio entre el hombre, la naturaleza y los espíritus queda plasmado a la perfección, amenazado por las máquinas y la ambición. Una joya que me encantaría ver animada por Hayao Miyazaki!