Ana Pérez Vega

  • Paris Leónciteerde uit2 maanden geleden
    Pero disimulo mal, ¿quién hay que sepa esconder el fuego, si él solo se delata por el brillo de su luz? Con todo, si esperas que además añada mi voz a los hechos, «ardo», ésa es la palabra que tienes como embajada de mi [10] corazón.
  • Paris Leónciteerde uit2 maanden geleden
    Antes de verte la cara con los ojos la vi con el corazón; la fama de tu hermosura fue la primera recadera. Y no tiene nada de raro si te amo, como [40] es habitual 281 ,
  • Paris Leónciteerde uit2 maanden geleden
    También mi hermana Casandra, despeinada como estaba, cuando querían nuestras naves izar ya las velas me gritó: «¿A dónde corres? Volverás trayendo contigo incendios. No sabes en busca de qué inmensa llama vas por estas aguas». Fue profetisa verídica; encontré los fuegos [125] de su presagio, y un amor despiadado arde en mi sensible pecho.
  • Paris Leónciteerde uit2 maanden geleden
    También mi hermana Casandra, despeinada como estaba, cuando querían nuestras naves izar ya las velas me gritó: «¿A dónde corres? Volverás trayendo contigo incendios. No sabes en busca de qué inmensa llama vas por estas aguas». Fue profetisa verídica; encontré los fuegos [125] de su presagio, y un amor despiadado arde en mi sensible pecho.
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