El ABC de la iluminación

Pero, entonces, ¿por qué habla la gente? Hablan para ocultarse detrás del ruido. Siempre que estás nervioso te pones a hablar.

todo lo que te pasa es exactamente lo que te tiene que pasar.

Cuando sientes que te elevas, que asciendes, que te precipitas hacia arriba como si el cielo tirase de ti, tienes la oportunidad de conocer un mundo completamente diferente.

El planteamiento oriental es que la vida es angustia y ansiedad, y que ser conscientes de ello nos impele a tratar por todos los medios de trascenderlo.

Cada cual es único e incomparable. Sólo eres tú mismo: no ha habido ni habrá nadie como tú ni tienes por qué parecerte a nadie.

Así como el cuerpo necesita comida, el alma necesita amor.

en vez de tratar de evitar el dolor, experiméntalo. Deja que duela como un demonio. Deja que duela intensamente para que la herida se abra del todo, pues sólo entonces empieza a sanar.

No proyecta, sino que sólo observa; sea cual sea la circunstancia, es un espejo pasivo. Eso es claridad.

La vida es cambio. Sólo hay una cosa permanente, y es el propio cambio.

Si nadie te quiere, acabarás suicidándote, pues eres incapaz de quererte a ti mismo. Si fueses capaz de quererte a ti mismo, si fueses capaz de prestarte atención a ti mismo, no necesitarías la atención de nadie más.