En su Museo Travesti del Perú Giuseppe Campuzano proclamó “Toda peruanidad es un travestismo”. El travestismo puede ser simplemente el usar las prendas asociadas con el sexo opuesto a quien las porta: un hombre vestido de mujer o una mujer vestida de hombre. Pero la palabra “travestismo” también es usada en la lengua castellana para referirse al ocultamiento, la parodia e incluso el fraude. La declaración de Campuzano simultáneamente deconstruye la identidad nacional y las nociones de género binario. Ser “peruano”, designarnos por medio de un nacionalismo identitario, supone ponernos un disfraz que cubre la enorme diversidad de quienes pertenecemos, de una forma o de otra, a ese territorio y a esa idea llamados Perú. La peruanidad no es menos disfraz que las prendas que buscan marcarnos como hombres o mujeres.
Despadre: Masculinidades, travestismos y ficciones de la ley en la literatura peruana es una exploración de las maneras en que nuestra literatura ha imaginado al “hombre peruano” desde esquemas patriarcales que, desde los mismos textos, revelan sus inconsistencias y debilidades. En un sistema que ve en las figuras paternas la encarnación de la Ley, los textos aquí analizados develan el travestismo implícito en tales figuras: los padres socavan la propia ley que dicen representar y dan lugar a peligrosos juegos de espejos que sostienen la corrupción y el cinismo. El análisis de Saona descubre en nuestra literatura las grietas de una imagen masculina ajena a la experiencia de quienes deberían encarnarla. Al explorar los encubrimientos, máscaras y artificios de masculinidades que se enarbolan sobre relaciones de raza, clase y sexualidad, este libro propone releer nuestra literatura para replantearnos los esquemas con los que definimos el género sexual.
Saona analiza obras de Mario Vargas Llosa, José María Arguedas, Antonio Gálvez Ronceros, Gregorio Martínez, Giuseppe Campuzano, Mario Bellatin, Oswaldo Reynoso, Eduardo Eielson, Rafael Dumett y Gustavo Faverón.