Un libro reflexivo, que explora la presencia de la ausencia y la búsqueda de un padre, para tratar de encontrarse a sí misma.
Compruebo con este libro, lo que me pasa con la literatura actual latinoamericana, historias que tratan de aspectos muy personales pero contadas como desde detrás de un velo que no infieran en un lado demasiado interior, humano, esa cosa que encontrabas en aquellos del boom latinoamericano.